Prescripción y deudas caducas

Seguramente has escuchado sobre la prescripción y las deudas caducas en el momento en que te charlan del Buró de Crédito.

Se le llama prescripción al paso que duran las deudas registradas en la base de datos del buró, por decirlo de alguna manera.

El tiempo en el que están registradas depende asimismo del monto de la deuda; o sea la cantidad de adeudo y de créditos que debas.

Sin embargo, la prescripción está sujeta a reglas, que en un caso así están determinadas por la Ley para Regular las Sociedades de Información Crediticia.

También participa en la regulación el Banco de México, una corporación que interviene en muchos aspectos relacionados a instituciones financieras.

Asimismo, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) se hace cargo de efectuar estrictas auditorías al Buró de Crédito.

El plazo más largo a fin de que prescriba una deuda puede ser de hasta seis años, dependiendo el caso.

¿Cuántos años deben pasar a fin de que caduque una deuda?

Para que una deuda pueda ser caduca es preciso que transcurran de cuatro a seis años sin que tengas alguna actividad crediticia.

Por actividad crediticia nos referimos a la petición de algún crédito personal, bancario, departamental, hipotecario o bien de auto.

Los periodos de tiempo como lo hemos mentado cambian en dependencia de la cantidad que se deba y del género de crédito que estemos hablando.

¿Qué es lo que desea decir que una deuda está prescrita?

En el caso de las instituciones financieras, una deuda está prescrita cuando no ha pasado la data de caducidad de esa deuda y todavía puede demandarse.

Por ejemplo, imaginemos que le debes dólares americanos 2 mil pesos al banco desde hace tres años y la deuda caduca en dos años.

Antes de que transcurran esos dos años sobrantes, el banco decide emprender alguna acción para demandar ese pago.

En ese instante la deuda está prescrita, en tanto que todavía no ha caducado.

¿En qué momento prescriben las deudas?

Las deudas se prescriben en el tiempo establecido por la ley, esto es que todas y cada una de las deudas tienen una data de caducidad.

Una vez que llega la data de caducidad, la deuda prescribe y no hay posibilidad de demandar.

Regularmente las deudas como las tarjetas de crédito prescriben a los cinco años de que hayas dejado de abonar tu deuda.

¿Cuál es la diferencia entre caducidad y prescripción?

La diferencia primordial que hay entre la caducidad y prescripción es que en la primera apunta el tiempo en que vence la deuda y no hay posibilidad de demandarla.

Por su parte, la prescripción de la deuda empieza en el momento en que has dejado de abonar, mas el banco todavía tiene posibilidades de demandar la deuda .